La teoría de las inteligencias múltiples, es un modelo que permite entender la mente basada en que cada persona tiene -al menos- ocho inteligencias o habilidades cognoscitivas. Fue elaborado por Howard Gardner en 1983. Para él, la inteligencia no es un conjunto unitario que agrupe diferentes capacidades específicas, sino la capacidad para resolver problemas o elaborar productos que sean valiosos en una o más culturas.
En el artículo de hoy hablamos sobre la importancia de esta teoría para integrar las inteligencias múltiples a través del juego, como base del proceso educativo, ya que, sobre todo, en la etapa de la educación infantil es donde se deben incluir cambios en la forma de enseñar, que consecuentemente producirán cambios en la forma de aprender.
UN AUTOR INTELIGENTE
Howard Gardner, hijo de refugiados de la Alemania nazi, es conocido en el ambiente educativo por su teoría de las inteligencias múltiples. Investigador de la Universidad de Harvard, tras años de estudio puso en jaque a todo el sistema educativo en EE.UU. Gardner define la inteligencia como una capacidad.
Si revisamos la historia, hasta hace pocos años, la inteligencia era considerada como algo estático e innato. Uno no se hacía inteligente, se nacía inteligente. La educación no podía cambiar ese hecho. Tanto es así que en épocas muy cercanas a los deficientes psíquicos no se les educaba porque se consideraba que era un esfuerzo inútil. Al definir la inteligencia como una capacidad Gardner la convierte en una destreza que se puede desarrollar. Es importante destacar que no niega el componente genético, pero aporta una definición sobre la inteligencia que amplía el campo de lo que es la inteligencia y reconoce que la brillantez académica no lo es todo.
INTELIGENCIAS MÚLTIPLES
Es voz populi que para desenvolvernos en esta vida no basta con tener un expediente académico brillante. Sabemos que hay personas de gran capacidad intelectual pero incapaces de, por ejemplo, saber elegir amistades nutricias y, por el contrario, otras personas menos brillantes en el colegio que triunfan en su vida personal o dentro del mundo de los negocios. Este autor explica que triunfar en los negocios, o en los deportes, requiere ser inteligente, pero en cada campo utilizamos un tipo de inteligencia distinto. Ni mejor ni peor, sólo distinto.
Todos nacemos con unas potencialidades marcadas por la genética, sin embargo, esas potencialidades se van a desarrollar de una manera o de otra dependiendo del contexto, nuestras vivencias, la educación que recibamos o la cultura que nos rodee.
Está claro que ningún deportista de élite llega a la cima sin entrenar, por buenas que sean sus cualidades naturales. Lo mismo se puede decir de los matemáticos, los poetas o personas emocionalmente inteligentes. En resumen, Einstein no era más inteligente que Michel Jordan, sin embargo, sus inteligencias pertenecen a campos diferentes.
UNA MANERA DIFERENTE DE APRENDER
Se considera que la comunidad docente debe ser la guía que trabaje en colaboración con el alumnado estas inteligencias múltiples. Generar un cambio de paradigma con metodologías novedosas que cambien la manera de aprender, dotar a los niños y a las niñas de herramientas, no sólo para fomentar su desarrollo sino también para conocerse a sí mismos y, por ende, valorarse, saber relacionarse con sus iguales y potenciar sus fortalezas al conocer sus virtudes.
La etapa de Educación Infantil se convierte en un periodo crítico para tal objetivo, ya que, el alumnado posee al menos ocho tipos de inteligencia que permite realizar distintas funciones y que podemos trabajar de diferentes modos. Estas inteligencias son:
La Inteligencia Lingüística: pensar en palabras.
Es la capacidad para poder usar palabras de forma efectiva, bien sea de forma oral o escrita. Ser capaz de procesar con rapidez mensajes lingüísticos, ordenar palabras y dar sentido coherente a los mensajes que reciben. Los niños y niñas aventajados en esta inteligencia disfrutan contando cuentos e historietas reales o imaginarias, recuerdan con facilidad datos, nombres, lugares, etc. Gracias al trabajo de la Inteligencia Lingüística podrán aprender a expresarse, a escuchar, a sentir las palabras e incluso a contar historias.
La Inteligencia Física o Kinestésica: Pensar en movimiento.
Es la capacidad para usar el propio cuerpo como medio de expresión de ideas y sentimientos, así como usar el cuerpo para realizar actividades y juegos. Este alumnado disfruta con actividades físicas como saltar, bailar, tocar, correr, gesticular, etc. Mediante la estimulación aprenderán a mover, utilizar y divertirse con su propio cuerpo, a jugar con los objetos, a expresarse por medio de él y a pensar a través de sensaciones y de movimientos.
La Inteligencia Lógico-Matemática: Pensar razonando.
Es la capacidad para usar los números de un modo efectivo, razonar adecuadamente basándonos en la lógica, dar sentido a aspectos fundamentales de la vida. Con actividades que supongan clasificar y razonar, como los puzles, rompecabezas, laberintos, etc., les ayudaremos a desarrollar la inteligencia lógico-matemática. Pueden aprender vocabulario visual, a jugar con los números, realizar clasificaciones y series, a gestionar las emociones mediante la lógica y ser capaces de pensar en números.
La Inteligencia Espacial: Pensar en imágenes.
Es la capacidad para percibir imágenes externas e internas, para moverse de forma segura y libre comprendiendo el espacio 3D. A través de la exploración del mundo que nos rodea, observándolo y manipulándolo, podremos conseguir estimular el desarrollo de su Inteligencia Espacial mediante la realización de este tipo de actividades, podrán aprender a moverse en el espacio, a realizar construcciones y puzzles, aprender a imaginar, a moldear, a inventar y a diseñar, siendo capaces de pensar para moverse y utilizar el movimiento con un fin determinado.
La Inteligencia Musical: Pensar a través de ritmos y melodías.
Es la capacidad para percibir, discriminar, transformar y expresar las formas musicales. A los sujetos de esta edad les encanta la música, cantar, aplaudir y escuchar canciones. Tienen predilección por escuchar los sonidos del ambiente. Imitan con la boca, les gusta escuchar su propia voz y la del resto personas. Con diferentes recursos que están a nuestro alcance, favoreceremos el desarrollo musical en sus primeros años de vida: podrán aprender a disfrutar de la música, a reconocer sonidos, a cantar y a recordar melodías, a bailar e incluso podrán crear música y tocar instrumentos musicales.
La Inteligencia natural: Pensar a través del mundo que les rodea.
Es la capacidad de sentirse atraído por el mundo natural, de conocer el medio ambiente y de sensibilizarse con él aprendiendo a cuidarlo y a respetarlo. Nuestro alumnado de esta etapa infantil ama la naturaleza, la cuidan y también poseen sentimientos de cariño y de respeto hacia el mundo que les rodea. Les enseñaremos a visualizar la naturaleza, a interactuar con el medio, a experimentar el mundo, podrán cuidar plantas y animales, conocer los beneficios del medio ambiente y de este modo se podrá fomentar un gusto y respeto por la naturaleza.
La Inteligencia Interpersonal: Ponerse en los zapatos del otro.
Es la capacidad para entender a los demás y poder relacionarse eficazmente con ellos y ellas desarrollando la empatía hacia los demás. A los pequeños y a las pequeñas les gusta negociar, escuchar, ocuparse de la resolución de un conflicto, formar equipos, comunicarse, etc. De esta forma podremos conseguir el óptimo estado de desarrollo de esta Inteligencia, ya que, de ella dependerá la capacidad para relacionarse con las personas que les rodean en la actualidad o que lo harán en un futuro.
Realizaremos actividades que permitan a los niños y a las niñas a aprender que hay más tipos de sonrisas, podrán aprender a ser cariñosos y a relacionarse. También a conocer a amigos y a amigas, informarse sobre qué son las actitudes sociales o valores y podrán aprender cómo empatizar con los demás.
La Inteligencia Intrapersonal: yo, mí, me, conmigo.
Es la capacidad de comprenderse a uno mismo, con el fin de organizar pequeños espacios de la vida, desarrollar la identidad propia conociendo nuestras debilidades y fortalezas consiguiendo así incrementar la autoestima. Podremos estimular al alumnado con actividades que les permita poder aprender quiénes son, conocerse a sí mismos y a sí mismas, quererse de una manera individual, aprender y desarrollar su propia personalidad.
Todas estas ideas, en base a la teoría de las Inteligencias Múltiples de Gardner adaptada a la etapa de Educación Infantil, son las que muchos profesionales educativos consideramos fundamental para ofrecer herramientas que permitan afrontar con destreza la vida, para tomar decisiones siendo conscientes de sus fortalezas y del porqué de sus preferencias en las actividades que realizamos.
“Todos somos genios, pero si juzgas a un pez por su capacidad para escalar árboles, vivirá toda su vida pensando que es un inútil.”
– A. Einstein.
BIBLIOGRAFÍA
- Gardner, H. (1987). La teoría de las inteligencias múltiples. Santiago de Chile: Instituto Construir.
- Pizarro, J. M., & Hernani, B. P. (2016). Propuesta para la implementación de la teoría de las Inteligencias Múltiples en el sistema de Educación Infantil en España. Revista electrónica interuniversitaria de formación del profesorado, 19(3), 199-207.
- Sancho-Álvarez, C., & Grau Vidal, R. (2012). Las inteligencias múltiples en el aula de Educación Infantil.